Después de conocer a Deadpool en la película X-Men Origins: Wolverine y ver como el argumento de la película destrozaba al genial Ryan Reynolds en su papel como Wade Wilson, creí que no vería al personaje en mucho tiempo.
Pues así es, desde aquella película que en mi opinión es mediana en cuanto a resultados, en 2009 fuimos testigos del cómo un intento de Deadpool superpoderoso caía decapitado por Wolverine (Hugh Jackman). Esta versión bizarra de Deadpool (eso es posible, ya lo vimos) era, según esta película, un mutante con una habilidad inigualable en el manejo de las katanas y armas de fuego. El Coronel William Stryker fue el encargado de liderar Weapon X, en donde Wilson obtendría una serie de poderes extraídos de un sin numero de mutantes. Era poseedor de la habilidad de Cyclops de disparar energía por los ojos, tenía el factor curativo de Wolverine y en apariencia también su esqueleto había sido cubierto de Adamantium pues mostraba un par de enormes navajas integradas a su endoesqueleto. Además de que tenía la habilidad de teletransportarse al estilo de John Wraith / Spectre (Will.i.am).
Al final, hay una escena post-créditos en la que se nos revela que Deadpool sobrevivió al ataque de Wolverine y Sabertooth (Liev Schreiber), dandonos a entender que veríamos mucho más de este personaje al cual descaradamente se le extravió de una de las características que lo definen: su insana capacidad de hablar con el público espectador (nosotros).
La crítica destruyó a la precuela en donde se nos narraban los acontencimientos que dieron origen a Logan como el legendario Wolverine, por muchas razones, siendo principalmente la alteración del personaje de Deadpool que cuenta con una gran cantidad de fans decepcionados por su mediocre adaptación. Ojo, aquí es donde resalta la importancia de comentar que poco tuvo que hacer Ryan Reynolds frente al tratamiento final de su personaje en la susodicha película.
Comenzando esa mala racha en el género de los cómics adaptados al cine en el historial de Reynolds, pues ya había interpretado a un personaje en una película del género (Blade Trinity en 20014) y posteriormente interpretó para DC Cómics la que sería la primera piedra de su universo cinematográfico: Green Lantern (2011). Destrozada de igual forma por la crítica, esta última película marcó una tendencia en el actor de participar en producciones mal recibidas por el gran público en taquilla y por la crítica del público al que nos gusta el género. Aquí tengo que aclarar que las películas que he mencionado hasta este momento no se encuentran en mi Top de peores adaptaciones de los cómics al cine, por lo que me daré el tiempo de compartirles después mi opinión al respecto de estas.
En la edición antepasada de la Comic-Con en San Diego (California) se filtró una breve escena elaborada en CGI en la que vemos a un Deadpool muy fiel a su apariencia en los cómics y atacando a un convoy de lo que parecen ser matones. Este personaje rompía con la cuarta pared (hablar con el espectador), cosa que hace Deadpool en los cómics y presentaba una digna representación de sí mismo. La sorpresa fue mayor cuando se revelo que el responsable de esta escena y participante en la producción de la escena era el mismísimo Ryan Reynolds. Arriesgandose a una demanda por parte de la productora Twenty Century Fox, dueña de los derechos cinematográficos del personaje al formar parte del universo de los X-Men.
Esta asaña fue la prueba de fuego que al puro estilo de Dark Phoenix hizo revivir las esperanzas en una nueva versión fílmica del personaje y, mejor aún al menos para mi, ver a Reynolds de nueva cuenta encarnando al mercenario y antihéroe. Los fans de hueso colorado del personaje amaron este acontecimiento y poco tiempo después la productora confirmó la incorporación de una nueva película de Deadpool a su calendario de futuras producciones basadas en el universo de los mutantes, en este caso para el 12 de febrero del 2016. El encargado de dirigir esta nueva aventura de redención y éxito para Reynolds y el personaje con el que se ha comprometido es Tim Miller, director que debutará en una producción cinematográfica y en específico de este género.
Un aspecto que preocupaba a los fans del personaje es el tono de la adaptación, es decir, el personaje esta diseñado para un público maduro por el tipo de historias e incluso por la propia personalidad del mercenario. Antes del estreno del espectacular trailer, Fox anunció que la clasificación de la película será R. Algo de celebrarse pues no se compromete para nada el estilo original que debe de mantenerse en el traslado de Deadpool del cómic a las salas de cine. Un punto más a favor es que el alter ego de Wade Wilson pone de manifiesto un conocimiento amplio de la culturar pop en sus diálogos, cosa que podemos ver reflejada fielmente en el trailer, mofándose de la anterior suerte de Ryan Reinolds en su carrera actoral en el mundo de las adaptaciones fílmicas de los cómics.
Voy a terminar sin decirles más detalles acerca de esta nueva película, solo quería hacer un recuento sobre los acontecimientos que decantaron en esta divertida producción. Tengo que aclararles que no soy un asiduo seguidor de Deadpool, no obstante se reconocer un buen personaje cuando lo veo y este en particular ha atrapado mi atención al saber que veremos la expansión del universo cinematográfico de los X-Men precisamente comenzando por esta película.
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